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¿Qué tipos de lentes existen?
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Existen varios tipos de lentes pero interesa sobre todo diferenciarlas por su capacidad de enfoque. Por un lado, las lentes monofocales permiten el enfoque a una sola distancia y aportan una gran calidad visual. Las lentes multifocales corrigen la visión de lejos y cerca, aportando gran comodidad e independencia de gafas. Las lentes tóricas están disponibles en estas dos modalidades y sirven para corregir astigmatismos moderados y altos.
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Las lentes intraoculares EDOF responden a un acrónimo inglés, extended depth of focus, que significa lentes de profundidad de foco extendida, y suponen una mejoría y evolución de las lentes monofocales. Las lentes EDOF son una excelente opción en muchos casos: permiten una buena calidad visual en distancias lejanas e intermedias. A diferencia de las lentes intraoculares trifocales, a pesar de no conseguir la independencia total de gafas de cerca, evitan la presencia de los halos nocturnos. Por otra parte, el proceso de adaptación visual es también mucho más corto, y la calidad óptica conseguida es muy elevada.
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¿Cómo se sabe cuál es mi lente ideal?
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Se realizan una serie de mediciones del ojo con un aparatos como biómetros y topógrafos, siendo una de las medidas más importantes la longitud total del ojo. Es importante que los pacientes que utilizan lentillas duras descansen de ellas al menos de 5 a 7 días, y los pacientes que utilizan lentillas blandas descansen de ellas durante al menos 24 horas antes de las mediciones, para evitar cualquier tipo de inexactitud. Con estos datos y la exploración, podremos asesorarte qué lente es mejor para tu caso.
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¿Puedo corregir las dioptrías de mi ojo?
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Sí. En la mayoría de los casos se corrige prácticamente todas las dioptrías de miopía hipermetropía y astigmatismo. Si se emplea una lente monofocal es habitual necesitar gafas unicamente para cerca (tareas como leer o coser) después.
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